Estamos en un período crítico de nuestra sociedad globalizada: Cambio climático, contaminación, vulneración de Derechos Humanos, escasez de agua, hambre, pobreza, violencia, guerras, prevaricación, demagogia y abuso de poder, hambre,  drogas,  procesos  antidemocráticos, problemas de justicia, especialmente en el área social. Todo ello genera efectos nocivos a la sociedad y a las empresas.

Empresarios y directivos debieran tener las competencias necesarias para saber gestionar  en tiempos de crisis, asegurando un mejor control de la situación.

Existen sistemas,  normas,  modelos de gestión,  formación, que ayudan a  desarrollar  las competencias absolutamente necesarias  para  capitanear  el  barco  frente  a  las tempestades, con lo cual se podrá garantizar el futuro de las empresa y de los puestos de trabajo, disminuyendo el paro y la pobreza.

Si las empresas contaminan, si creen que pueden tener trabajadores «de usar y tirar», si sus objetivos económicos están por encima de los intereses sociales, aunque sean muy rentables, NO SIRVEN.

Los diecisiete objetivos de Naciones Unidas (Agenda 2030) para transformar nuestro mundo han sido elaborados para superar una decadencia que amenaza con la extinción de la especie humana y la biodiversidad del planeta.

No podemos ser insensibles, indiferentes, observadores pasivos esperando que algunos políticos hagan algo, porque sencillamente, el futuro de la vida está en juego a un corto plazo.

Si hacemos lo que siempre hemos hecho no llegaremos más allá de donde siempre hemos llegado.

Hay que actuar, hay que unirse en  la diversidad de criterios políticos, religiosos, económicos, empresariales, colaborando y cooperando, anteponiendo el beneficio del bien común de una sociedad globalizada, por encima de intereses de partes. Han de prevalecer los valores de igualdad, justicia, cuidado de la salud, educación, derechos humanos,  bienestar para todos, cuidado del medio ambiente y de toda la diversidad biológica para la continuidad de la vida.

Frente a todo ello, las organizaciones, gobiernos, empresas que apoyan los Objetivos de Naciones Unidas -Agenda 2030- han comprendido  que hay que actuar ahora, ¡YA!, para llegar a cumplirlos en esta fecha, en la cual se espera que toda esta situación esté debidamente encaminada y en vías de solución. El único camino viable es el de las alianzas y compromisos entre las Instituciones, la sociedad civil organizada y las empresas, ya que ellas son la principal fuente de riqueza de la sociedad. Este es el último, y no menos importante, de los 17 objetivos de Naciones Unidas.

Dentro de este movimiento generalizado a nivel mundial  nace «Miesesglobal.org», Movimiento Internacional de Excelencia, Salud Empresarial y Sostenibilidad, con la voluntad de sumarse a este reto colectivo. Es una organización sin ánimo de lucro formada por profesionales de diferentes disciplinas y organizaciones comprometidas en ayudar a construir empresas saludables, socialmente responsables y sostenibles en las cuales las personas sean el motor del cambio.

Las empresas deben manejar sus objetivos, tanto los tangibles como los intangibles, de forma que todos los miembros de la organización descubran que a través de ellos pueden desarrollarse personal y profesionalmente, y encontrar significado a lo que hacen, involucrándose en el necesario proceso de cambio que ha de producirse a todos los niveles, tanto en lo económico como en lo social.

Hemos de ayudar a empresarios-as y directivos-as a que su labor gestora sea más sencilla, eficaz y humana, y se sientan apoyados por colaboradores-as competentes y comprometidos-as que faciliten las cosas, convirtiendo lo complejo en sencillo y asumible.

Con empleos precarios, sueldos bajos, mínima formación, contratos temporales, etc., que generan insatisfacción, inseguridad y enfermedades, acortando la vida de personas y empresas, los empresarios y directivos pierden credibilidad; la empresa no puede ser sostenible y también ellos se convierten en esclavos de su trabajo. Sin el necesario compromiso, talento y aporte de las personas las organizaciones no tienen futuro.

Todo lo que es injusto para cualquiera de las partes lo es para la economía y la sociedad.

Hay que actuar, !HOY !Mañana puede ser demasiado tarde ¿TE SUMAS? Recordemos que la Responsabilidad Social es un compromiso de todos-as.

 

Andrés Senlle

Director del I Foro Internacional de Desarrollo Sostenible (Maldonado, Uruguay, 2016)

Socio Fundador de MIESES